La escasez de chips de computadores de 2021, una nube que se cierne sobre empresas como Tesla Inc. y McDonald’s Corp., muestra señales de mejora, pero no para todos.
Si bien fabricantes de chips como Qualcomm Inc. y Advanced Micro Devices Inc. proyectaron un tono optimista esta semana, ciertos productos seguirán siendo escasos durante algún tiempo. Eso enfrenta a empresas como Apple Inc. a un dilema: aunque algunas entregas de semiconductores están más cerca de lo normal, muchas compañías todavía no tienen los componentes necesarios para completar sus complejos dispositivos tecnológicos.
Apple dijo que la escasez contribuirá a una menor tasa de crecimiento este trimestre y empeorará. Y hay una ironía: el fabricante del iPhone espera obtener suficientes de los chips más avanzados que la empresa necesita. La dificultad es encontrar los más simples. Samsung Electronics Co., el principal proveedor de pantallas de alta gama para el gigante de Cupertino, alertó que la escasez de componentes puede afectar los envíos a clientes no especificados en los próximos meses.
Ha sido “difícil conseguir todo el conjunto de piezas”, dijo el director ejecutivo, Tim Cook, durante una teleconferencia.
En resumen, el problema es este: incluso el procesador Apple M1 más avanzado no puede funcionar solo. Los dispositivos modernos dependen de una miríada de partes diferentes, algunas de las cuales cuestan apenas centavos. La escasez de componentes tan comunes como un regulador de energía puede detener la producción de un artículo de mil dólares.
La falta de piezas también perjudica la disponibilidad de computadores Surface de Microsoft Corp., y desacelera el crecimiento del mercado de los PC en general, dijo la compañía. El director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, dijo que la escasez de chips de computador limitará la tasa de crecimiento del fabricante automotriz durante el resto del año.
Bajo este contexto, también hubo buenas noticias esta semana.
Si bien se vio impactada por la escasez de chips, Ford Motor Co. dijo el miércoles que los precios más altos de los automóviles ayudaron a compensar las ventas que perdieron debido a los déficits. Qualcomm, el mayor fabricante de chips para teléfonos inteligentes, prevé una “mejora sustancial de la oferta para fin de año”.