Hace unos años, los bancos de la plaza panameña luchaban por innovar con la adecuación de sus plataformas tecnológicas para ofrecer mejores servicios en línea. Los primeros pasos se dieron con la creación de portales más amigables que permitían revisar los estados de cuenta.
Después se agregaron herramientas para hacer transferencias en efectivo y pagos de servicios en línea, y así las soluciones fueron integrando más servicios, como la solicitud de préstamos personales y tarjetas de crédito en las plataformas. Se habla ya de la billetera electrónica y el pago sin contacto, y las pantallas para agilizar más el comercio electrónico y un sinnúmero de servicios digitales.
La digitalización es el pan de cada día en el sistema financiero, y con ella las llamadas fintech, empresas tecnológicas financieras, revolucionan el negocio de la banca tal y como la conocemos.
Un estudio sobre el progreso del ecosistema fintech en América Latina y el Caribe, publicado a finales de 2018 por el Banco Interamericano de Desarrollo y Finnovista, detalla que la cantidad de emprendimientos fintech en la región pasó de 703 a mil 166 en 18 países de la región, un crecimiento de 66% en el último año. Más de la mitad de esas empresas se dedican a crear soluciones tecnológicas y financieras en los segmentos de pagos y remesas, préstamos y gestión de finanzas empresariales (Vea: Reporte Infográfico en la página 12).
Panamá aparece en este informe con solo seis emprendimientos fintech registrados, al igual que República Dominicana, mientras que Costa Rica contaba con nueve para el momento de la publicación del estudio.
Según Felipe Echandi, de la fintech Cuanto y fundador de Pana Fintech, en Panamá existen algunos proyectos que se posicionan como mecanismos de colaboración con la industria tradicional al ofrecer plataformas abiertas a las que cualquier banco puede conectarse para ampliar la oferta de productos bancarios, como las plataformas de préstamos en línea, mientras que otros emprendimientos en otros segmentos son vistos como competidores.
Las fintech incursionan en el mercado panameño como una oportunidad para resolver problemas que tradicionalmente y por su estructura la banca no puede atender; es el caso de Adelantos, que surgió para dar préstamos a la base de la pirámide, es decir, a las poblaciones de escasos recursos que no tienen el perfil de financiamiento para acceder a préstamos del buró de créditos formal. La plataforma nació en 2016 y dio sus primeros préstamos de entre 50 y 500 dólares en 2017, relata Raymond Katz, socio fundador de Adelantos.
La banca se acopla a la revolución ‘fintech’
Sostuvo que otro problema que vieron en el mercado fue la trampa de la deuda. “Resolvimos el tema de los pagos mínimos y aplicamos un sistema en el que el pago que se haga de una vez amortiza capital y la deuda baja más rápido. Muchas personas no tenían acceso al buró de crédito o tenían un mal historial”. El procedimiento es totalmente online y cuenta con herramientas de inteligencia artificial que analiza las variables del perfil de los clientes para determinar su riesgo.
“Atendemos a clientes que no son atendidos en los bancos, pero hemos hecho alianzas con varias instituciones que nos remiten clientes para dar microcréditos, y una vez que pagan esos pequeños préstamos y se gradúan con Adelantos, los bancos entonces los consideran para créditos mayores de auto y hasta hipotecas, por ejemplo”.
Katz admite que el proceso de aceptación de soluciones tecnológicas financieras en el país ha sido lento; al principio los bancos veían estas propuestas con ciertas reservas, pero en 2018 ya varios bancos se decidieron a trabajar en conjunto en este caso con Adelantos para atender al perfil de cliente que la estructura financiera por su rigidez no admite. “Trabajamos con cinco instituciones financieras de la plaza panameña”.
Además, cuentan con un producto denominado Adelantos Móvil, para dar financiamiento para la adquisición de dispositivos electrónicos como teléfonos inteligentes en operadores de telefonía y tiendas de tecnología.
Otro de los casos en Panamá de fintech es la creación de estas plataformas desde los propios bancos, como Nequi, de Banistmo. “Se trata de un neobanco dentro de Banistmo para manejar el dinero, pagar en comercios, mandar dinero a las personas, pagar servicios en línea como Netflix, Spotify, Paypal, y ahora vamos a sacar la tarjeta Nequi”, relata Diego Ponce, vicepresidente de Innovación y Transformación Digital de Banistmo.
Precisa que el reto de la banca es ofrecer servicios y plataformas que se adapten a las necesidades y hábitos de los consumidores. “Los usuarios ya se han acostumbrado a consumir contenido en los teléfonos celulares, desde videos hasta música, y la expectativa que tienen es que el sistema bancario también facilite esa movilidad y esa inmediatez”.
El siguiente paso de Nequi será hacer alianzas para dar microcréditos, ampliar los topes de ahorro y dar más opciones para pagar servicios en línea. La plataforma tiene más de 50 mil usuarios en Panamá y la meta es llegar a 100 mil este año.
“Para la banca hay una gran oportunidad, porque hay muchas plataformas de servicios financieras basadas en la economía colaborativa o crowdsource, como las crowdfunding y crowdlending, que son plataformas que junta personas que quieren prestar, invertir en un proyecto o pedir préstamos”.
Maribel Samudio, gerente ejecutiva de canales virtuales del Banco Nacional de Panamá (Banconal), señala que esta institución desarrolla colaboraciones o alianzas con fintech con el fin de lograr mayores beneficios a la prestación de servicios financieros y tener presencia activa en la era digital.
“En banca digital hemos tenido el lanzamiento oficial de la billetera electrónica y por medio de los acuerdos de colaboración con las fintech queremos dar facilidades como microcréditos que estarán disponibles en la billetera electrónica en el mediano plazo”, reveló.
Las fintech apoyan la inclusión financiera porque su modelo de negocio es más flexible, impulsado por el manejo de datos inteligentes.
Patricio Silva, CEO director de la plataforma Digital Bank, precisa que una de las tendencias del sector financiero regional es cómo incorporar el proceso de las fintech en sus productos y servicios. “Antes las fintech representaban una amenaza, pero hoy se están viendo como una colaboración y muchos bancos están adoptando metodologías tecnológicas para mejorar portafolios de servicios”.
Con la revolución tecnológica en la banca, ya en varios países hacer pagos a través de Whatsapp se ha vuelto habitual, al igual que gestionar créditos a distancia y proporcionar soluciones de bitcóin, blockchain para el comercio.
Entretanto, en Panamá y la región, los usuarios adoptan rápidamente soluciones tecnológicas y aplicaciones móviles para sus transacciones. La eliminación del efectivo que se reemplaza por el pago digital y móvil marca la hora, además de otras propuestas tecnológicas. Los bancos pueden ser los protagonistas con sus propios desarrollos o a través de alianzas con fintech. Todo, pero menos ignorar los cambios tecnológicos en el negocio financiero.